WhatsApp se ha convertido en una aplicación indispensable para la mayoría de los internautas, algo que no es de extrañar teniendo en cuenta que el 95% de teléfonos móviles ya son smartphone (según el Estudio Mobile 2015 publicado por IAB el pasado 29 de septiembre).
En el mismo estudio se recoge que el uso diario del smartphone se sitúa en un 85%, un 18% más que el ordenador portátil y un 19% más que el PC de sobremesa.
Aún así, uno de los datos más reveladores del estudio es el tiempo de conexión diario, cuya media ha sido de 3h 23m, casi una hora más respecto al año anterior.
En lo referente a WhatsApp, los datos son muy positivos. Un 93% afirma chatear o enviar mensajes instantáneos a diario o realizar llamadas a través de esta aplicación, mientras que un 75% tiene la App instalada en su smartphone, 3 puntos más que en 2014.
WhatsApp en las empresas
Estos datos dejan entrever el enorme potencial de esta aplicación de mensajería instantánea, pero, ¿están aprovechando las empresas esta herramienta?. Y si lo están haciendo, ¿están dando al usuario lo que quiere?.
Según los datos del estudio, los usuarios están dispuestos a recibir comunicaciones logísticas (envíos o compras) o comunicaciones de seguridad (información bancaria o de acceso a páginas web), pero sólo un 17% está abierto a recibir promociones y descuentos por mensajería instantánea.
Esos datos revelan que los usuarios, en general, no quieren que las empresas utilicen este canal para realizar comunicaciones comerciales.
WhatsApp PC en las empresas
Más allá de la información que se extrae del estudio, cabe mencionar que WhatsApp es una gran herramienta de atención al cliente. Muchos usuarios buscan inmediatez en el contacto con sus proveedores, por lo que en empresas como compañías aseguradoras, talleres mecánicos o entidades bancarias, WhatsApp puede ser una gran solución siempre que se utilice de manera adecuada y no intrusiva.
Cabe mencionar que WhatsApp PC es de gran utilidad cuando se trata de atención al cliente, ya que la escritura en PC o portátil es mucho más rápida que desde un smartphone.
Finalmente, recordar que la seguridad de la información enviada a través de WhatsApp deja mucho que desear, por lo que se debe evitar mantener conversaciones ‘sensibles’ con los clientes, así como el envío de datos personales.